Jueves rico todo el día, rico para estar en la camita empiernado con la susodicha o el susodicho según sea el caso, pero les apuesto que muchos se levantaron medio abrieron el ojo vieron la hora y no podían creer que no había amanecido, como pudieron se quitaron la tradicional lagaña y algunos otros residuos del rostro.
Tomaron la toalla se fueron hacia el baño abrieron las llaves de la regadera se dieron un rico baño medio despertaron eligieron la ropa para el día de hoy, en algunos casos ya tenían su atuendo desde la noche previa, el desayuno o a la carrera hacia el trabajo.
Unos cuantos “minutos” en el tráfico, saludos en la oficina y zaz un chingo de trabajo, presiones, gritos, sombrerazos, catorrazos y mentadas de madre cuando, afuera el día estaba nublado, con llovizna que al paso del tiempo se volvió en lluvia, un poco de frio y en tu casa tu cama esperándote con un edredón calientito, quizá una botellita de vino una peli romántica cursi pus que chingas, es válido para darle gusto a la pareja no?
Pero regresas la vista y en tu escritorio hay una computadora prendida, el teléfono sonando y algunos documentos por revisar y de tu boca se escucha un “PUTA MADRE”…
El día sigue según lo planeado, osea terminar lo antes posible e irte a tu casa, tu cama de seguro te espera todavía el vino pues ahí seguirá la película la reproduces en el momento que quieras y la pierna con la que te quieres acurrucar pues también ahí estará, eso siempre y cuando la tengas, porque de lo contrario, solo habrá más vino para servir en tu copa…
Siempre es demasiado tarde
Hace 3 años
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